Tribunal

No, hoy no vengo a hablaros del tribunal que juzga los exámenes de la oposición (del que ya os hablé aqui), si no de otro bien distinto. Algunos viernes en mi academia los preparadores deciden probar este experimento con nosotros, que para ellos es un juego y para nosotros más bien una pesadilla. Aunque cada uno tiene su hora de cante (esto es un poco relativo) esperan a que nos juntemos 2-3 personas y nos pasan a cantar juntos. Es decir que cada uno es escuchado cantar por sus compañeros y a su vez puede escucharlos cantar. 

Sirve para que te vayan quitando el miedo a cantar en público y sirve para que veas como lo hacen los otros. Ya os recomendé ir a oir un examen cuando se desarrollen las convocatorias oficiales, pero esto también puede ser útil aunque a pequeña escala. En mi caso canto después de una chica que lleva un par de años más que yo y otra que empezó a la vez, así que puedo aprender como debería hacerlo con el tiempo y con la otra voy comparando nuestra evolución. 

Es cierto que las comparaciones son odiosas y que cada uno tiene su ritmo, pero a veces también se aprende, incluso cosas como el lenguaje corporal, expresiones para hilar temas... En fin, que aunque se sufre, de vez en cuando merece la pena intentarlo para seguir creciendo en nuestro aprendizaje.

Frase del día: Valor es lo que se necesita para levantarse y hablar; pero también es lo que se requiere para sentarse y escuchar. (Winston Churchill)